El 19 de agosto de 1921, hace poco más de 100 años, nació en Navarra (España), el P. Luis Urriza, quien fue ordenado sacerdote hace 77 años y que ha estado sirviendo como párroco en la Diócesis de Beaumont, en el estado de Texas (Estados Unidos).
El P. Luis realizó el año de Noviciado en Calahorra (La Rioja) y profesó los votos temporales en la Orden de San Agustín en el año 1937. El sitio web de los agustinos indica que estudió Filosofía en Calahorra (1937-1940) y Teología entre Calahorra y El Escorial (Madrid) entre 1940 y 1944. Hizo sus votos solemnes en 1941.
Fue ordenado sacerdote en 1944 y siguió sirviendo en Calahorra como profesor y como capellán del ejército español en LEÓN.
A fines de 1949 es enviado a Estados Unidos. Después de pasar por Nueva York y Port Arthur, fue enviado a la ciudad de Beaumont, una zona petrolera a la que llegaron muchos hispanos, especialmente mexicanos. Allí vivió entre 1952 y 1963.
Luego estuvo en Waxahachie y San Antonio, ambas ciudades en Texas. En la segunda estuvo 11 años. En 1975 dejó la pastoral parroquial para ocuparse durante dos años en difundir el “Movimiento por un mundo mejor” en Estados Unidos.
En 1977 volvió a Beaumont, concretamente a la parroquia de Cristo Rey, donde ha sido párroco hasta la actualidad..
En la parroquia fundada en 1951 y con la ayuda del vicario parroquial, P. Michael Minifie, el P. Urriza asistió a 635 familias, según indica el sitio web de la diócesis. La ciudad de Beaumont tiene unos 120 mil habitantes con alrededor de 18 mil hispanos.
En 2009 el Papa Benedicto XVI le otorgó al P. Urriza la Cruz Pro Ecclesia et Pontifice, galardón que se otorga a una persona que ha ofrecido un gran servicio a la Iglesia Católica o al Papa.
La Cruz Pro Ecclesia et Pontifice (Por la Iglesia y el Papa) fue instituida por el Papa León XIII el 17 de julio de 1888, en la celebración de sus 50 años de ordenación sacerdotal.
Aunque vivió en Estados Unidos desde hace mucho, en agosto de 2019 el P. Urriza recibió la ciudadanía estadounidense, cuando tenía 98 años.
En 2019 cientos de fieles también se reunieron en la parroquia Cristo Rey para la celebración de los 75 años de sacerdocio del P. Urriza.
En esa ocasión, el ahora Obispo Emérito de Beaumont, Mons. Curtis Guillory, agradeció al sacerdote por “sus muchos años de ministerio en el sudeste de Texas” y comentó que el P. Urriza “ha inspirado y motivado a muchos durante todo su ministerio”.
Poco después de su cumpleaños, en agosto, el obispo de Beaumont le informó que había llegado su hora. Otro sacerdote, más joven, se encargará de Cristo Rey. Su orden enviaba al padre Luis a un nuevo ministerio en España, su país de origen, para unirse a otros religiosos que servían en una iglesia cerca de Madrid.
Esa era la prueba de los votos de obediencia que tomó hace ocho décadas y de la confianza que pone en la voluntad de Dios. Cree que fue una trayectoria trazada divinamente la que hizo que su madre lo llevara a un monasterio en España cuando tenía 12 años, una decisión que al final lo trajo a Texas. Ahora vuelve a desarraigarse.
Esperaba que lo dirigieran a un rumbo en el que pudiera seguir trabajando y ser útil, aunque otros esperan que descanse. “Dios hace cosas que uno no entiende”, dijo. “Tal vez me necesitan allá”.
El P. Luis Urriza es un gran ejemplo de fidelidad a Dios, de servicio a pesar de su edad y de sus limitaciones.