HABEMUS PAPAM

En la tarde del jueves día 8, saltaba la noticia,  el Cardenal Francis Robert Prevost, estadounidense. 69 años. De la  Orden de San Agustín (O.S.A.) que ha tenido una destacada trayectoria en la Iglesia Católica,  ha sido elegido Papa con el nombre de León XIV.  Es el primer pontífice nacido en Estados Unidos,

Formación y vocación religiosa

Prevost ingresó al noviciado de los agustinos en 1977 y profesó sus votos solemnes en 1981.  Obtuvo una licenciatura en Matemáticas en la Universidad de Villanova en 1977 y una maestría en Teología en la Catholic Theological Union de Chicago.  Posteriormente, completó estudios de licenciatura y doctorado en Derecho Canónico en la Pontificia Universidad de Santo Tomás de Aquino en Roma  .

Servicio misionero en Perú

Entre 1985 y 1998, Prevost sirvió como misionero en Perú, desempeñándose como párroco, profesor de seminario, vicario judicial y formador en la Prelatura de Chulucanas y en Trujillo.  Durante este tiempo, se naturalizó como ciudadano peruano  .

Liderazgo en la Orden de San Agustín

En 2001, fue elegido Prior General de la Orden de San Agustín, cargo que ocupó hasta 2013.  Su elección fue una de las más rápidas en la historia de la orden, siendo reelegido para un segundo mandato en 2007  .

Episcopado y servicio en la Curia Romana

En 2014, el Papa Francisco lo nombró administrador apostólico de la Diócesis de Chiclayo en Perú, y en 2015 fue nombrado obispo de esa diócesis.  En enero de 2023, fue designado Prefecto del Dicasterio para los Obispos y presidente de la Pontificia Comisión para América Latina  .

Cardenalato y elección como Papa

El 30 de septiembre de 2023, fue creado cardenal por el Papa Francisco.  El 8 de mayo de 2025, fue elegido Papa durante el cónclave, adoptando el nombre de León XIV, siendo el primer estadounidense en ocupar el papado  .

La elección de León XIV marca un hito en la historia de la Iglesia Católica, reflejando su experiencia misionera, liderazgo en la vida religiosa y compromiso con la reforma eclesial.

Discurso inaugural del Papa León XIV

8 de mayo de 2025 – Plaza de San Pedro

 “La paz sea con todos vosotros, hermanos y hermanas carísimos.”

Este es el primer saludo del Cristo Resucitado, el Buen Pastor, que ha dado la vida por el rebaño de Dios.

También yo quisiera que este saludo de paz llegue hasta sus corazones, les alcance a sus familias, a todas las personas, donde quiera que se encuentren, a todos los pueblos, a toda la tierra.

La paz esté con ustedes.

Esta es la paz del Cristo Resucitado, una paz desarmada y desarmante, y también perseverante, que proviene de Dios, que nos ama a todos incondicionalmente.

Todavía conservamos en nuestros oídos esa voz débil, pero siempre valiente, del Papa Francisco, que bendecía a Roma.

El Papa que bendecía a Roma daba también su bendición al mundo entero, aquella mañana del Día de Pascua.

Permítanme dar continuidad a esa misma bendición: que Dios nos quiere mucho. Dios ama a todos, y el mal no prevalecerá.

Estamos todos en las manos de Dios.

Por lo tanto, sin miedo, unidos. Mano de la mano, con Dios entre nosotros, vayamos adelante.

Seamos discípulos de Cristo. Cristo nos precede. El mundo necesita de su luz.

La humanidad necesita de Él como el puente para ser alcanzada.

Ayudémonos también los unos a los otros a construir puentes:

con el diálogo, con el encuentro, uniéndonos todos para ser un solo pueblo, siempre en paz.

Gracias al Papa Francisco.

Quisiera agradecer también a todos los hermanos cardenales que me han elegido para ser el sucesor de Pedro y caminar junto a ustedes como Iglesia unida, buscando siempre la paz, la justicia, buscando siempre trabajar como hombres y mujeres fieles a Jesucristo, sin miedo, para proclamar el Evangelio y para ser misioneros.

Soy un hijo de san Agustín, agustino, que ha dicho: “soy cristiano, y para ustedes, obispo”.

En este sentido, podemos todos caminar juntos hacia esa patria que Dios nos ha preparado.

A la Iglesia de Roma, un saludo especial.

Tenemos que buscar juntos cómo ser una Iglesia misionera, una Iglesia que construye puentes de diálogo, siempre abierta a recibir, como esta plaza, con los brazos abiertos a todos, a todos aquellos que tienen necesidad de nuestra caridad, de nuestra presencia, de diálogo y de amor.

(En español)

A todos ustedes, hermanos y hermanas, de Roma, de Italia y de todo el mundo:

Queremos ser una Iglesia sinodal, una Iglesia que camina, una Iglesia que busca siempre la paz, que busca siempre la caridad, que siempre busca estar cerca de quienes sufren.

Hoy, día de la Virgen de Pompeya, nuestra Madre María quiere caminar siempre con nosotros, estar cerca de nosotros, ayudarnos con su intercesión y su amor.

Ahora, quisiera rezar junto con ustedes.

Recemos juntos por esta nueva misión, por toda la Iglesia, por la paz en el mundo, y pidamos esta gracia especial de María, nuestra Madre.

Haciendo Click en el enlace puedes acceder a la primera Homilía del Santo Padre León XIV en la misa del 9 de Mayo en la Casa de Santa Marta: