Convocados los miembros de las cinco parroquias y de la residencia » P. Saturnino López Novoa» acudieron – los que pudieron hacerlo- a la eucaristía en la iglesia de » S. Vicente, Mártir» martes 4 de febrero a las 5 de la tarde. Una vez repartidas las hojas de la misma dio comienzo la celebración con el Rvdo.D. José Antonio Iguacel, vicario parroquial y consiliario del grupo de María Auxiliadora. En la homilía se exaltó el acierto de tener como patronos a estos dos ancianos que son modelos a seguir en nuestras vidas por ser peregrinos de la fe, testigos de esperanza y amigos de Dios.
Todos renovamos la conciencia de sentir la vejez como un tiempo de gracia en el que el Señor nos sigue llamando a custodiar y transmitir la fe, la experiencia de la vida y los valores cristianos en todos los ambientes en que nos encontremos. Se pidió al Señor por los miembros ausentes enfermos para que se sientan acompañados, reconfortados y esperanzados. Y, siempre alegres en el cultivo de nuestros pilares: Amistad, Espiritualidad y Apostolado. En la ‘acción de gracias’ se expresaron muy amplia y variadamente lo referente a nuestras vidas: La vida como el regalo mayor de Dios amoroso y con sonrisas y buen humor a pesar de nuestras limitaciones físicas y porque estamos abiertos a nuevas experiencias, a conocer e interpretar el mundo en que vivimos. También agradecimos las vidas de los miembros que ya han pasado por el misterio de la muerte y fiamos en que estén con el Padre. Resultó una eucaristía participativa, entrañable y animadora que terminó con el canto de nuestro himno.
