SANTOS PATRONOS EN ALGECIRAS

El pasado viernes día 9 de febrero los dos grupos de V.A. de Algeciras celebraron el día de los patronos en la Iglesia principal de Tarifa, teníamos previsto celebrarlo en el Santuario de la Vg. De La Luz pero al ser su (aniversario patronazgo) trasladaron a la Virgen al pueblo.

Asistimos 27 personas que participamos en la Iglesia principal de Tarifa » San Mateo» del Ángelus impartido por el sacerdote D. Juan Pedro Varo y a continuación la Eucaristía presidida por nuestro consiliario D.Valentin Vivar en donde tuvo presente el mensaje del Santo Padre » Peregrinos de la esperanza como V.A..

Nos explica de manera sencilla en la homilía «La presentación del Señor» como » luz para anunciar a las naciones y gloria de su pueblo Israel»

A continuación

Acudimos al Casino municipal donde compartimos un almuerzo de amistad y convivencia.

Consuelo Martín

LA SANTA DE LA SEMANA: SANTA ANNE LINE

Santa Anne Line Mártir, inglesa; murió el 27 de febrero de 1601. Fue hija de William Heigham de Dunmow, Essex, caballero de buena posición económica y un ardiente calvinista. Cuando ella y su hermano manifestaron su intención de convertirse en católicos, ambos fueron repudiados y desheredados por su padre. Anne contrajo matrimonio con Roger Line, converso como ella, pero poco después de su casamiento fue detenido por asistir a Misa. Tras un breve confinamiento, fue puesto en libertad y se le permitió ir al exilio en Flandes, donde murió en 1594.

Cuando el padre John Gerard estableció una casa de refugio para sacerdotes en Londres, la encomendó a la señora Line. Después de la fuga del padre Gerard de la Torre en 1597, cuando las autoridades comenzaban a sospechar que Line le ayudaba, ella se trasladó a otra casa, la cual convirtió en centro de reuniones para los vecinos católicos. El día de la Fiesta de la Candelaria de 1601, el Padre Francis Page, S.J. se disponía a celebrar la Misa en los apartamentos de ella, cuando irrumpieron los cazadores de sacerdotes. El padre Page inmediatamente se quitó las vestimentas y se juntó con los demás, pero el altar preparado para la ceremonia era toda la evidencia necesaria para el arresto de la señora Line. Fue enjuiciada en Old Bailey el 26 de febrero de 1601, y acusada según el acta 27 Eliz. por dar albergue a un sacerdote, aun cuando esto no pudo probarse. Al día siguiente fue llevada a la horca, y valientemente proclamó su fe y alcanzó el martirio por el que había rogado.

Dos sacerdotes compartieron su destino: Mark Barkworth, O.S.B., y Roger Filcock, S.J., que fueron ejecutados al mismo tiempo. Roger Filcock había sido por mucho tiempo amigo y frecuente confesor de la señora Line. Después de entrar al Colegio Inglés de Reims en 1588, fue enviado junto con otros en 1590 a colonizar el seminario de San Albans en Valladolid, y tras completar su curso allí fue ordenado y enviado a la misión inglesa. El padre Garnet le hizo pasar un periodo de prueba de dos años para comprobar su temple antes de admitirlo a la Compañía de Jesús; finalmente lo aceptó al ver que era celoso y valeroso. Ya estaba a punto de cruzar hacia el Continente para cumplir su noviciado cuando fue arrestado por sospechas de ser sacerdote y fue ejecutado después de una farsa de juicio.

(N. de la T.: Fue beatificada el 15 de diciembre de 1929 por Pío XI y canonizada el 25 de octubre de 1970 por Paulo VI, entre los cuarenta mártires de Inglaterra y Gales cuya fiesta conjunta se celebra el 25 de octubre.)

Bibliografía: MORRIS, Life of Fr. John Gerard; CHALLONER, Memoirs, I, 396; FOLEY, Records S.J. I, 405; VII, 254; Douay Diaries, p. 219, 280; Hist. MSS. Com. Rep. Rutland Coll. Belvoir Castle, I, 370; GILLOW, Bibl. Dict. Eng. Cath.

Fuente: Quinn, Stanley. «St. Anne Line.» The Catholic Encyclopedia. Vol. 9, pág. 270. New York: Robert Appleton Company, 1910. 19 oct. 2021 <http://www.newadvent.org/cathen/09270b.htm>.

Traducido por Manuel Rodríguez Rmz. lmhm

ARMAS DE GUERRA ¡PARA DEFENDER LA PAZ!

En estos últimos días los medios de comunicación han estado informado de las presiones, ejercidas sobre los gobiernos europeos, por el presidente de una poderosa nación, para que gasten más, mucho más dinero, en lo que irónicamente, califica de defensa, o sea, en armas. En la portada de un periódico de hoy se puede leer: “España prevé duplicar su gasto en defensa”. Las naciones fabrican armas de guerra con el falso propósito de defender la paz. Es el colmo de la ironía, es una descarada mentira. Porque la paz no se defiende con armas, sino con amor. ¿Cuál es el propósito último, qué se busca con la fabricación de armas? Pues, entre otras cosas, aumentar la cifra de negocios. Porque el negocio de armas es uno de los más suculentos. Sería interesante saber quiénes son los accionistas y los beneficiarios de este negocio. Si se fabrican armas es para utilizarlas y, con su uso, no se fomenta la paz, sino el caos, el desorden, la pobreza, la miseria. Eso sí, la miseria para muchos y la riqueza para unos pocos.

Si de verdad buscan la paz, lo que deberían hacer es dedicar ese dinero que gastan en armas en producir alimentos para que desaparezca el hambre en el mundo. O dedicar ese dinero para que los pueblos más pobres puedan progresar económicamente. Si así lo hicieran los habitantes de esos países pobres no tendrían que emigrar. Y así se evitarían los riesgos que comporta la emigración, además de los desarraigos que conlleva. Y de paso ahorraríamos gasto en policía de fronteras y evitaríamos represiones innecesarias.

Hace ya muchos años que Juan Pablo II escribió lo que luego han venido repitiendo sus sucesores: “Todos sabemos muy bien que las zonas de miseria y de hambre que existen en nuestro globo hubieran podido ser fertilizadas en breve tiempo, si las gigantescas inversiones de armamentos que sirven a la guerra y a la destrucción hubieran sido cambiadas en inversiones para el alimento que sirven a la vida” (Redemptor Hominis, 16). Por su parte, Francisco, en Fratelli tutti, propone la eliminación total de las armas nucleares y a que, con el dinero que se usa en armas y otros gastos militares, se constituya un fondo mundial para acabar con el hambre y para el desarrollo de los países más pobres, de tal modo que sus habitantes no acudan a soluciones violentas o engañosas ni necesiten abandonar sus países para buscar una vida más digna.

Así que, por favor, señores gobernantes, no nos tomen por tontos. Porque eso de que las armas de guerra sirven para defender la paz es un insulto a la inteligencia. ¿Y quienes insultan a la inteligencia? Los listos y los buenos, desde luego, no.

Martín Gelabert Ballester. Blog Nihil Obstat

VIDA CREIXENT CELEBRA LOS SANTOS PATRONOS

En el marco siempre cautivador de la Casa de la Iglesia (Academia Mariana) en Lleida,  el pasado 5 de febrero nuestro movimiento Vida Creixent celebró  la fiesta de sus Patronos Simeón y Ana.

Inició la jornada nuestro  Consiliario Mn. José A. Jové con una reflexión  y la impresionante  plegaria de Saint Exupery “El arte de los pequeños pasos….No pido milagros y visiones, Señor, pido la fuerza para la vida diaria”.

A continuación Mn. Juan Manuel Bajo, autor del libro Primavera en el atardecer de la vida, que guía este curso las reuniones de los grupos parroquiales con sus orientaciones formativas,  expuso con solidez y belleza los valores que a través de cuentos o parábolas tienen el poder de transformar nuestras vidas, aún en el atardecer, como el bienestar, la fortaleza, paz, crecimiento, felicidad, compartir, generosidad, servicio, creer, serenidad.

Tras un breve descanso, tuvo lugar la Asamblea en la que se aprobó la renovación de la Junta que estará presidida por Montserrat Bacardí en sustitución de Antonia Mª Filella que renuncia por motivos personales.

El Obispo Salvador, entusiasta impulsor de nuestro movimiento apostólico, quiso unirse a la fiesta haciéndose presente en la Eucaristía que presidió y concelebró junto a algunos  consiliarios. Animó a los miembros de Vida Creixent a vivir la vida como una verdadera fiesta en la que están presentes las contrariedades y las alegrías de la existencia, como lo fue para nuestros referentes Simeón y Ana hasta su encuentro con el niño de Belén en el Templo.

Seguidamente tuvo lugar un almuerzo para reforzar los lazos del encuentro en un ambiente festivo y hasta con actuación musical. La satisfacción por parte de los asistentes fue plena y agradecida.

SANTOS PATRONOS EN HUESCA

Convocados los miembros de las cinco parroquias y de la residencia » P. Saturnino López Novoa» acudieron – los que pudieron hacerlo- a la eucaristía en la iglesia de » S. Vicente, Mártir» martes 4 de febrero a las 5 de la tarde. Una vez repartidas las hojas de la misma dio comienzo la celebración con el Rvdo.D. José Antonio Iguacel, vicario parroquial y consiliario del grupo de María Auxiliadora. En la homilía se exaltó el acierto de tener como patronos a estos dos ancianos que son modelos a seguir en nuestras vidas por ser peregrinos de la fe, testigos de esperanza y amigos de Dios.

Todos renovamos la conciencia de sentir la vejez como un tiempo de gracia en el que el Señor nos sigue llamando a custodiar y transmitir la fe, la experiencia de la vida y los valores cristianos en todos los ambientes en que nos encontremos. Se pidió al Señor por los miembros ausentes enfermos para que se sientan acompañados, reconfortados y esperanzados. Y, siempre alegres en el cultivo de nuestros pilares: Amistad, Espiritualidad y Apostolado. En la ‘acción de gracias’ se expresaron muy amplia y variadamente lo referente a nuestras vidas: La vida como el regalo mayor de Dios amoroso y con sonrisas y buen humor a pesar de nuestras limitaciones físicas y porque estamos abiertos a nuevas experiencias, a conocer e interpretar el mundo en que vivimos. También agradecimos las vidas de los miembros que ya han pasado por el misterio de la muerte y fiamos en que estén con el Padre. Resultó una eucaristía participativa, entrañable y animadora que terminó con el canto de nuestro himno.

SANTOS PATRONOS EN TOLEDO

El día 5 de febrero celebramos el Día de los Santos Patronos de la Diócesis de Toledo, en la parroquia de S. José Obrero de Toledo. Contamos con la presencia de D. Ángel Rubio, Obispo Emérito, con D. Juan Luis Gómez, Consiliario de la Diócesis y varios sacerdotes de la parroquia, como Consiliarios de grupos, además de, alrededor de 70 personas de Vida Ascendente de nuestra Diócesis, como veis, un nutrido número de miembros.

Empezamos con el Acto de Acogida dentro del templo, para continuar con una procesión por el recinto exterior de la parroquia, con las candelas encendidas que D. Ángel Rubio nos las bendijo. A continuación, rezamos el Ángelus y pasamos dentro para celebrar la Eucaristía, que la presidió el mismo, junto con los Vicarios y los sacerdotes presentes.

Un acto muy entrañable, ya que todos los que estábamos nos une un mismo propósito, seguir avanzando en el camino de Vida Ascendente para alcanzar la meta soñada.

Después tuvimos una comida de hermandad.

Fue un día muy bonito y completo, compartiendo mesa y vivencias. Nos despedimos con la intención y seguridad de vernos muchas más veces.

Lina González

Presidenta de Vida Ascendente de la Diócesis de Toledo.

CELEBRACIÓN DE LOS SANTOS PATRONOS EN CORIA-CÁCERES

Este año hemos tenido la mejor celebración de los Patronos de los últimos años.

Vida Ascendente en Coria Cáceres, está renaciendo, con fuerza y con alegría.

Hicimos una programación ajustada y realista con nuestras posibilidades.

El programa constó de tres actos, en los que seríamos acompañados por nuestro Sr. Obispo, D. Jesús Pulido Arriero, el consiliario diocesano, D. Juan Manuel Garcia Acedo y los consiliarios de grupo que pudieran participar.

A las 12 Una asamblea informativa.

A las 13 Eucaristía concelebrada por el Sr. Obispo y los consiliarios. (D. Francisco Neila, nuestro más leal colaborador) no concelebró, aunque estaba presente, por tener además tres Eucaristías ese día. Que además cumplía 85 años y le felicitamos efusivamente.

Fué una Eucaristía especial. Se respiraba alegría, fraternidad y entusiasmo por cómo va el Movimiento y la Pastoral de mayores en la diócesis. Muy participativa. Se pidió por los miembros y sus allegados difuntos. (Cosa que agradecieron, ya que se nombraba al difunto y la relación con el Movimiento). La Homilía es digna de guardarla en los anales, por su profundidad y originalidad. (Había recopilado en la Biblia, lo referente a los mayores, positivo y negativo, para transformarlo en bien) Lastima que no la grabamos. Estaba tan feliz, nuestro Obispo, que nos hacía compartir sus reflexiones. Le hemos pedido que nos la dé por si tenéis a bien compartirla.

Después todos juntos nos fuimos a comer, allí muy cerquita.

Cada consiliario, se puso en la mesa del grupo de su parroquia, ya que la mayoría era la primera vez que asistían y así se sentían más unidas. El local quedó pequeño y nos tuvieron que habilitar otro contiguo. Pues a nadie se le iba a decir que ya no cabía.

Hicimos el sorteo de dos preciosos angelitos. (Tenemos costumbre de llevar algún regalo, como recuerdo del día) que le tocó precisamente a una persona del grupo nuevo de San Juan que por cierto no se había podido quedar a comer, pero se lo llevaron sus compañeras. También, hubo un representante de las residencias, con lo que le suponía de esfuerzo por sus dificultades de movilidad, pero que disfruto como un niño.

Todos nos despedimos felices deseando que estos encuentros se repitan.

CELEBRACIÓN DE LOS SANTOS PATRONOS EN ALCALÁ

El pasado lunes, día 3 de febrero, celebramos en la Diócesis de Alcalá de Henares la festividad de nuestros Santos Patronos Simeón y Ana. Un gran número de representantes de los distintos grupos del Movimiento acudimos a dicha celebración, pudiendo participar, a su vez, en el Jubileo de los Mayores en este año jubilar de la esperanza 2025.

A las 12,00 horas estábamos convocados en el Monasterio de San Bernardo y nuestro Consiliario Nacional Don José Ignacio Figueroa hizo una reflexión e introducción de lo que era el jubileo en el pueblo judío. El Papa Bonifacio VIII proclamó el primer jubileo universal en 1300 como Año Santo.

Hoy los jubileos son ordinarios cada 25 años, o extraordinarios en el caso de un año especial declarado por el Pontífice, por ejemplo el jubileo extraordinario de la Misericordia, convocado por el Papa Francisco en 2015.

El jubileo en la Iglesia es siempre una oportunidad de mirar a Cristo de nuevo. Continuó diciendo que los ancianos que a menudo experimentan soledad y sentimientos de abandono merecen signos de esperanza, valorando el tesoro que son, sus experiencias de vida, la sabiduría que tienen y el aporte que son capaces de ofrecer. Que este jubileo sea una ocasión de reavivar la esperanza. Nuestra esperanza está en el Cielo.

¡Dejémonos  llevar hasta el Cielo!

De allí partimos hasta la Catedral Magistral en procesión, precedida por nuestro estandarte y la Cruz Jubilar, que ha sido realizada para esta ocasión, por internos del Centro Penitenciario de Estremera, y participamos en la Santa Misa Jubilar de la Esperanza 2025, que fue presidida por nuestro Obispo Don Antonio Prieto, y concelebrada con nuestro Consiliario Nacional y varios sacerdotes de la Diócesis.

El Obispo en la Homilía resaltó las figuras de Simeón y Ana, recordando que Dios se hace presente en la edad madura y con los primeros con los que quiso entrar en contacto, siendo un niño, fueron unos ancianos, Simeón y Ana.

La vida avanzada es un tesoro en el que Jesús se hace presente. Nos animó a vivir esta etapa de la vida asociados a los grupos de Vida Ascendente, seguir cultivando la fe, la amistad y el apostolado, los tres pilares sobre los que se construye y sustenta la Vida Ascendente y a transmitir la fe y la sabiduría de la vida a las generaciones más jóvenes.

Nos invitó, también, a rezar por la Iglesia y seguir formándonos en nuestra vida Cristiana. El Cielo estará siempre esperándonos. Es la esperanza que no defrauda.

Una vez finalizada la celebración Eucarística, que fue solemne, con la participación de un coro y el órgano de la Catedral, retornamos de nuevo al Convento de San Bernardo para compartir un almuerzo de fraternidad en el antiguo refectorio del mencionado Convento.

EL SANTO DE LA SEMANA: SAN BEATO DE LIÉBANA

El Beato de Liébana. Uno de los personajes religiosos que se contribuyeron a la importancia del Monasterio de Santo Toribio de Liébana fue Beato de Liébana.

El personaje religioso

Beato de Liébana, fue figura clave de la Iglesia hispana y europea, por dos motivos bien claros: fue defensor de la ortodoxia católica frente a la herejía adopcionista de Elipando de Toledo y fue el creador e impulsor del culto a Santiago Apóstol con su poema “O Dei Verbum”, en el que lo proclama “Cabeza refulgente de España”.

Apenas tres décadas más tarde, en el 813, Teodomiro, arzobispo de Iria Flavia, descubriría el sepulcro del Apóstol en Compostela; y el propio Rey, Alfonso II el Casto, sería el primer peregrino desde la corte de Oviedo a la tumba del Apóstol, donde mandó levantar un templo en su honor. Asimismo, Beato mantuvo gran amistad con el abad de Tours, Alcuino de York, consejero del emperador Carlomagno por lo que sus enseñanzas fecundaron toda Europa.

La obra cumbre de Beato, pieza fundamental en la historia del arte y la cultura, fue su “Comentario al Apocalipsis de San Juan” obra que llegó a ser el primer bestseller de la Edad Media y que acabaría denominándose “beato” en honor a su autor.

Con ella nuestro abad lebaniego aportó claridad en la lectura y comprensión del Apocalipsis. Beato inmerso y afectado por la época bélica que se vivía en la Península Ibérica en aquel entonces anunció que el fin del mundo llegaría en el año 800.

“En la Carta de los obispos de Spania a sus hermanos de la Galia, Elipando cuenta que Beato, en la vigilia de la Pascua, profetizó a un tal Ordoño y al pueblo lebaniego la inminente llegada del fin del mundo, por lo que, aterrorizado y enloquecido, el pueblo permaneció sin tomar alimento toda aquella noche y el domingo hasta la hora nona, en la que el citado Ordoño, al sentirse hambriento, se cuenta que dijo al pueblo: Comamos y bebamos, y si hemos de morir, al menos que estemos hartos.”

Joseba Abaitua

En el IV Concilio de Toledo, en el año 633, se aprueba la lectura diaria durante el tiempo de Pentecostés, del Libro del Apocalipsis de San Juan Evangelista. Un libro cargado de símbolos de muy difícil lectura y compresión.

El uso del comentario de Beato fue obligatorio, su lectura impuesta y los sacerdotes debían conocer la totalidad de sus escrituras. Sus textos cargados de imágenes explicativas a modo de cómic ayudaron a la lectura, al estudio y a la comprensión del Apocalipsis. Es decir, acercaron el conocimiento a todo el mundo.

A día de hoy la Iglesia lo reconoce más como un texto profético que simplemente vinculado a una época histórica. Asimismo también puede ser considerado como un libro, que lejos de anunciar el fin del mundo, contenga las claves de la salvación del ser humano, en clave espiritual, más como un camino a recorrer con sus claves, señales veladas tras su simbología, tal y como ocurre en el Camino de Peregrinación del verdadero peregrino.

El personaje político

Beato de Liébana se enfrentó a Elipando, el Obispo de Toledo, para desterrar la corriente religiosa del Adopcionismo, es decir, apodó hereje al Obispo de Toledo por decir que Jesucristo era hijo adoptivo de Dios y no hijo de sangre de Dios como defienden los encarnacionistas. Beato, con la ayuda de Carlomagno, logra imponer su cosmovisión y se alza como el máximo exponente político de la época, ya que política y religión eran en ese momento iban de la mano.

“Lo que había empezado por una cuestión de terminología técnica, se había agigantado y logró dividir a la Iglesia Española Mozárabe (y libre) e incluso a la antigua Iglesia del Pirineo oriental arrebatada a los musulmanes e incorporada al dominio franco. Elipando aún a sus ochenta años dirigiría otra carta a Carlomagno en la que deshonraría la figura de Beato.»

Joseba Abaitua

Beato de Liébana es un personaje de gran importancia política ya que además de su obra, es el personaje que marca un determinado rumbo de la historia de la España que comenzaba a ser reconquistada y unificada. Por un lado Beato de Liébana gana la batalla intelectual dentro de la Iglesia sobre el adopcionismo y, por otro lado, escribe el O Dei Verbum donde habla de España, pudiendo ser considerado el primer ideólogo de la reconquista española.

Es vital ubicarse en un momento de la Historia del mundo donde religión y política caminaban juntas, estamos en plena Edad Media. En este momento Elipando, el Obispo de Toledo, comienza a defender la idea de que Jesús era hijo adoptivo de Dios, lo que se conoce como el Adopcionismo, en contra de la Cristología Cristiana, la idea de que Jesús es Cristo y no “el Hijo de María” como lo llamaban los musulmanes. Beato se levanta, intelectualmente hablando contra esta idea y contra el Obispo de Toledo, el que, aunque cristiano, vivía en zona musulmana. Beato gana la batalla apoyado fielmente por Alcuino de York, primer consejero del Emperador Carlomagno, y una única corriente de pensamiento prevalece en la historia de la Iglesia a partir de ese momento.

Además, Beato, comienza a ensalzar la figura de Santiago El Mayor. Comienza a defender la idea de que el Apóstol era el evangelizador de España y con ello se empieza a aglutinar una idea de unión y comunión alrededor de su figura, que empieza ya a perfilarse como el Patrón de España. Beato se consideraba en posesión de la traditio, el heredero de la verdadera palabra del Apóstol Santiago que había elegido España para renacer.

“La gran luz proyectada por la pluma de Beato sobre el mundo brotó probablemente de su declaración del patronazgo de Santiago sobre España; esta declaración fue eficacísima para introducir entre los peninsulares la devoción a un apóstol al que jamás se había invocado”

Joseba Abaitua

Apenas tres décadas más tarde, en el 813, Teodomiro, arzobispo de Iria Flavia, descubriría el sepulcro del Apóstol en Compostela; y el propio Rey, Alfonso II el Casto, sería el primer peregrino desde la corte de Oviedo a la tumba del Apóstol, donde mandó levantar un templo en su honor. No se sabe a ciencia cierta si Beato aún vivía y conoció este hecho, pero los datos históricos de los que se dispone acuerdan en reconocer que Beato de Liébana fue un personaje vital para la historia social, política y religiosa de España, en su momento y de cara al futuro de un país que comenzaba a recuperar su identidad nacional.

CATEQUESIS PAPA FRANCISCO. JESUCRISTO, NUESTRA ESPERANZA. I. LA INFANCIA DE JESÚS. . 5. «LES HA NACIDO UN SALVADOR, QUE ES CRISTO EL SEÑOR » (LC 2,11). EL NACIMIENTO DE JESÚS Y LA VISITA DE LOS PASTORES

En nuestro camino jubilar de catequesis sobre Jesús, que es nuestra esperanza, hoy nos detenemos en el acontecimiento de su nacimiento en Belén.

El Hijo de Dios entra en la historia convirtiéndose en nuestro compañero de viaje, y comienza a viajar cuando aún está en el vientre de su madre. El evangelista Lucas nos cuenta que, apenas concebido, fue desde Nazaret hasta la casa de Zacarías e Isabel; y luego, al final del embarazo, de Nazaret a Belén para el censo. María y José se vieron obligados a ir a la ciudad del rey David, donde también había nacido José. El Mesías tan esperado, el Hijo del Dios Altísimo, se deja censar, es decir, contar y registrar, como cualquier otro ciudadano. Se somete al decreto de un emperador, César Augusto, que se cree el amo de toda la tierra.

Lucas sitúa el nacimiento de Jesús en «un tiempo que se puede determinar con precisión» y en «un entorno geográfico indicado con exactitud», de modo que «lo universal y lo concreto se tocan recíprocamente» (Benedicto XVI, La infancia de Jesús, 2012, 77). Dios, que entra en la historia, no desestabiliza las estructuras del mundo, sino que quiere iluminarlas y recrearlas desde dentro.

Belén significa «casa del pan». Allí se cumplieron para María los días del parto y allí nació Jesús, Pan bajado del cielo para saciar el hambre del mundo (cf. Jn 6,51). El ángel Gabriel había anunciado el nacimiento del Rey mesiánico con el signo de la grandeza: «He aquí que concebirás en tu seno y darás a luz un hijo, a quien pondrás por nombre Jesús. Él será grande y será llamado Hijo del Altísimo, y el Señor Dios le dará el trono de David, su padre, y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin» (Lc 1,32-33).

Sin embargo, Jesús nace de una forma totalmente inédita para un rey. De hecho, «mientras estaban en aquel lugar, se le cumplieron los días del parto. Dio a luz a su hijo primogénito, lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre, porque no había sitio para ellos en el albergue» (Lc 2,6-7). El Hijo de Dios no nace en un palacio real, sino en la parte trasera de una casa, en el espacio donde están los animales.

Lucas nos muestra así que Dios no viene al mundo con sonoras proclamas, no se manifiesta con clamor, sino que comienza su viaje en la humildad. ¿Y quiénes son los primeros testigos de este acontecimiento? Son unos pastores: hombres con poca cultura, malolientes por el contacto constante con los animales, que viven al margen de la sociedad. Sin embargo, ejercen el oficio por el que Dios mismo se da a conocer a su pueblo (cf. Gn 48,15; 49,24; Sal 23,1; 80,2; Is 40,11). Dios los elige para que sean los destinatarios de la noticia más maravillosa que jamás haya resonado en la historia: «No teman: porque les anuncio una gran alegría para todo el pueblo: hoy, en la ciudad de David, les ha nacido un Salvador, que es Cristo el Señor. Esto les servirá de señal: encontrarán a un niño recién nacido envuelto en pañales, acostado en un pesebre» (Lc 2,10-12).

El lugar al que acudir para conocer al Mesías es un pesebre. Sucede, en efecto, que, después de tanta espera, «para el Salvador del mundo, para Aquel en vista del cual todo fue creado (cf. Col 1,16), no hay sitio» (Benedicto XVI, La infancia de Jesús, 2012, 80). Los pastores se enteran así de que, en un lugar muy humilde, reservado a los animales, nace para ellos el Mesías tan esperado, para ser su Salvador, su Pastor. Esta noticia abre sus corazones al asombro, a la alabanza y a la proclamación gozosa. «A diferencia de tanta gente que pretende hacer otras mil cosas, los pastores se convierten en los primeros testigos de lo esencial, es decir, de la salvación que se les ofrece. Son los más humildes y los más pobres quienes saben acoger el acontecimiento de la Encarnación» (Carta ap. Admirabile signum, 5).

Hermanos y hermanas, pidamos también nosotros la gracia de ser, como los pastores, capaces de asombro y alabanza ante Dios, y capaces de custodiar lo que Él nos ha confiado: nuestros talentos, nuestros carismas, nuestra vocación y las personas que Él pone a nuestro lado. Pidamos al Señor saber discernir en la debilidad la fuerza extraordinaria del Niño Dios, que viene para renovar el mundo y transformar nuestras vidas con su proyecto lleno de esperanza para toda la humanidad.

Fuente The Holy See