La pasada semana, después de la reunión del grupo y de la Eucaristía nos fuimos a una cafetería a tomar un café calentito, cuando entramos al Tizzio, que así se llama el local nos encontramos una encantadora sorpresa, estaban preparando la última colección del pintor colivenc Antonio Berenguer Fuentes para que pueda ser disfrutada por el público.
Se trata de una colección monográfica de 17 cuadros de personas mayores, el artista estaba presente y charlamos un rato con él.
Antonio cual es el motivo de que te hayas decidido a plasmar la vejez en tu obra?
La vejez es una etapa más de la vida, yo mismo estoy en ella aunque físicamente este bien, como pintor he decidido que ¡Ya está bien de pintar rostros de jóvenes! La expresión de la belleza en las arrugas de un rostro muestra la riqueza de las emociones vividas a lo largo de la vida
Nos ha llamado mucho la alegría, frescura y armonía que desprende tu obra
La vejez no tiene por qué ser lúgubre ni aburrida. ¿Quién nos impide disfrutar del color en nuestro atuendo, salir con nuestros amigos, o estar felices por haber llegado hasta aquí, aprovechando todo lo bueno que la vida pone a nuestro alcance? Los mayores, pictóricamente hablando, y en la vida también, tenemos que poner equilibrio y armonía en este mundo que nos toca vivir, y también, por qué no, una chispa de locura.
Le dejamos que termine de instalar sus obras y nos vamos a tomar nuestro café, las pinturas nos han alegrado la tarde, esas pinturas irradian felicidad, los vivos colores animan a vivir esta etapa de la vida.
