Maribel de la Diócesis de Coria Cáceres, que acompañó junto a Ascensión de la Diócesis de Madrid, a nuestro presidente nacional Jaime Tamarit al Encuentro, nos cuenta su experiencia:
«Con gran alegría hemos participado en el Encuentro de Laicos, que tanta repercusión mediática está teniendo y con razón.
Desde mi punto de vista ha sido maratoniano, en contenido, innovación, nueva metodología y para cargar las pilas a todas las realidades de la Iglesia.
Nos hemos visto sorprendidos en una especie de jornadas nacionales multicolor. Ahí sí se apreciaba que el pueblo y la Iglesia está unida por la fuerza del Espíritu Santo que todo lo hace bien. No se veían corrientes laicistas, religiosas o clericales. Éramos unos hermanos felices viviendo fraternalmente, en sinodalidad, el anuncio del envío. Con una fuerza fuera de lo habitual. Trabajando con entusiasmo. Con tecnología que te calaba en lo profundo. Te fomentaba las ansias de trabajar en y por la Iglesia de Jesús. Que sigue viva y potente. Es para decir a todos: «Ven y veras»
El Cardenal Cobo en la Homilía de la Eucaristía de clausura del Encuentro de Laicos sobre el Primer Anuncio, que se realizó bajo el lema “Pueblo de Dios unido en la misión”, decía “En la misión evangelizadora no podemos excluir a nadie: ni a los lejanos, ni a los alejados, ni a muchos otros, que, con una fe débil, necesitan volver a acoger la Buena Noticia de Jesucristo”.
“Hoy se nos abren providenciales oportunidades para la misión evangelizadora. Se abren nuevos brotes que nos piden creer en el evangelio. Creer significa aprender a ver y confesar testimonialmente a Dios en esta realidad”.
Debemos salir de nuestra área de confort y comprobar con nuestros propios ojos que Dios nos ama y nos llama a que vayamos a anunciarlo a los demás, que este mundo de hoy necesita más que nunca que le llevemos al Dios de la alegría, que con su muerte y resurrección nos rescató.»
En el siguiente enlace puedes escuchar la homilía completa: